"Guti nos tiene otra vez buscando amapolas", por José Miguélez

Frío y lluvia, un panorama meteorológico de lo más incómodo. Un escenario hostil, el Gerland de Lyon, que el Madrid tiene desde hace años atravesado. Una estampa que rara vez sorprende a Guti
por el medio. El rubio centrocampista no estaba ayer, oficialmente, por
unos dolores en el pubis imposibles de confirmar médicamente (de Xerez,
el sábado, le apartó un esguince de tobillo) y cuyo diagnóstico depende
enteramente de las sensaciones personales del paciente. O sea, por un
acto de fe, el típico contratiempo que baja a menudo de las
convocatorias al segundo capitán del Madrid. Una combinación tan
conocida que sistemáticamente desabrocha las sospechas. “El que no me
crea, que se vaya a recoger amapolas”, zanjó Guti la última vez que se
vio apretado por la desconfianza ajena en una conferencia de prensa.
Ocurrió hace apenas un mes, pero dio igual. Así sigue.
Justo cuando su repentina resurrección había dado lírica al Madrid y
juego a su centro del campo, justo cuando un taconazo sublime y media
centena de pases tenía de nuevo al madridismo y la crítica a sus pies,
Guti va y desaparece. Siempre en un momento inoportuno, cuando al
Madrid le toca jugarse la bolsa y la vida. Anduvo siempre por debajo del Lyon el Madrid,
otra vez espeso, plano, mal, posiblemente tan mal como si hubiera
estado Guti. Pero Guti no estaba. Y desde que se conoció su ausencia,
dentro y fuera del club, la gente anda como loca buscando amapolas.
Aunque no sea época.

Heresy escribió:

Lo mas triste es que yo conozco a algunos madridistas que ven bien todo lo que hace este tío y encima te sueltan lo de "ya les gustaría a algunos del equipo ser lo madridista que es Guti"