Las ratas y los frigoríficos

En Nueva York las ratas están de enhorabuena. Se ve que como resultado del huracán Sandy se van a poner moradas a costa de los frigoríficos de los contribuyentes, también llamados damnificados, americanos. Las de Manhattan se van a poner como el quico de jamón ibérico y gambas. Las de Queens no van a dar abasto con los bocatas de hamburguesa con Katchup y pepinillos. Y las del Bronx, esas pasarán más hambre, pero siempre podrán evadirse de su triste destino de rata de barrio deprimido con una buena ración de "azúcar moreno" de la mejor calidad, mundialmente conocido como "Brown Sugar", aunque ya esté un poco pasado de moda.

Y es que en Nueva York tienen de todo y más. Por ejemplo, tienen ocho millones de ratas, tantas como habitantes. Y por eso tienen los frigoríficos llenos, para que coman sus ratas cuando vienen sus huracanes. En Nueva York no puedes ir al cine o a comer a un restaurán sin una rata que te acompañe. Incluso me han dicho que hay neoyorquinos que no tienen sombra, pero que se les identifica cuando van por la calle porque llevan una rata pegada a sus talones. Por eso les tienen tanta consideración a sus ratas, y por eso llenan sus frigorícos cuando vienen sus huracanes para que sus ratas no se mueran de hambre. Es algo inaudito.

En España no tenemos ocho millones de ratas, o a lo mejor sí, pero de momento, nadie las ha contado (cuando se cuenten se verá que tenemos más -ratas), sin embargo tenemos casi seis millones de parados. Y como tampoco tenemos huracanes, pues resulta que los frigoríficos están vacíos y los parados no pueden comer como las ratas de Nueva York. Por eso, entre otras cosas, hoy en día, vale más ser una rata de Nueva York que un parado de Talavera de la Reina.

Y es que el mundo es muy injusto, no me digais que no, ellos tienen a sus ratas ahítas con sus huracanes mientra nosotros tenemos a nuestros parados muertos de hambre y con los lunes al sol. Yo creo que todo el problema es meteorológico, o sea, de una lógica meteórica. Porque ellos tendrán las ratas, pero nosotros tenemos a los parados, porque nuestros son los flautistas de Hamelín que tocan de maravilla la flauta de Bartolo. Y es que no se puede tener todo en este mundo: las ratas y los flautistas. Y por eso los huracanes son de Nueva York y los parados de Talavera de la Reina. Creo que todo está muy claro. O no?

me rio aunque el tema es muy serio pero me ha hecho mucha gracia