El Madrid, el Barsa y el Handicap

Lo ha dicho Rubén, del Osasuna, el Barsa juega con ventaja porque juega sin handicap. Y el tipo ha dicho una gran verdad y ha dado en toda la diana, aunque haya sido sin querer - o, mejor dicho, pretendiendo lo contrario-, que el Barsa juega sin handicap y en cambio nosotros jugamos con handicap. Tenemos un handicap de inicio de partido de un jugador menos y un penalty no pitado. Que no está nada mal para empezar. Por eso están todos encantados de la vida de jugar contra nosotros y les preocupa más hacerlo contra el Barsa, como ha dicho también Canales. Y eso pasa por el handicap. Si quieren, para que estén más contentos les podemos dar más handicap: a partir de ahora jugaremos las segundas partes sin portero. Así no podrán quejarse.

Claro que si se trata de handicapar al Barsa, por nosotros que no quede, y además encantados. Estamos dispuestos a caparlos donde y cuando haga falta. Pues no somos nosotros nadie handicapando. Los capamos por delante o por detrás, como prefieran. Al fin y al cabo, es lo que los madridistas hemos hecho toda la vida: capar a los culés para que tengan mucho handicap. Y no crean, que en muchos momentos les capamos bastante, por lo que estaban tan handicapados que hasta daban pena. Los cues, digo. También les hemos dado a menudo en el handicap, pero como ahora no tienen, porque lo ha dicho Rubén, pues no podemos darles en el handicap de momento.

Pero que sepan Ruben y los suyos que estamos muy de acuerdo con ellos, el Barsa no tiene handicap en estos momentos y hay que handicaparlos de nuevo como sea, como ha sido toda la vida. Que nos den un poco de tiempo y un buen pito y ya verán como se los handicapamos antes de que les visiten en Osasuna, que no es Fuenteovejuna aunque suene igual pero ya quisieran ellos ser como aquellos. Y es que los de Fuenteovejuna no se dejaban handicapar por nadie, ni por el alcalde de su pueblo. No como el Osasuna, que siempre juegan handicapados contra el Barsa y por eso se quejan. Pues que no se preocupen, que ahí vamos y los capamos nosotros. Y no hace falta que nos den las gracias, porque nosotros lo haremos con mucho gusto. Será un placer.